El término cuperosis designa la presencia de ciertas dilataciones venosas que pueden aparecer en la piel de la cara alrededor de los 40 años. Sus localizaciones más frecuentes son las mejillas, las aletas de la nariz y a veces el mentón. Si no te cuidas, pueden derivar en una enfermedad llamada rosácea.
¿Cómo se forma la cuperosis?
Estas dilataciones aparecen como consecuencia de una pérdida de elasticidad de las vénulas y arteriolas de la dermis. No constituye en sí misma una enfermedad, pero sí un problema estético.
¿Por qué aparece?
Las sucesivas dilataciones y contracciones de las paredes de estos vasos hacen que, llegado determinado momento, queden dilatados y se hagan visibles. Estos vasos se aprecian como arborizaciones de color rojizo a las que corresponde el término médico de telangiectasias. Puedes presentarlas como consecuencia de factores tanto internos como externos.
Factores desencadenantes
Esta afección aparece con más frecuencia en las pieles sensibles, hiperreactivas y resecas. Agentes externos como radiación solar, jabones irritantes, cremas exfoliantes, peelings, cambios bruscos de temperatura o exposición continua al calor o al viento pueden causarte reacciones de vasodilatación y vasoconstricción.
Los desencadenantes internos pueden ser los cambios hormonales, el consumo de alcohol o tabaco, las comidas muy calientes o muy especiadas, algunas medicaciones y enfermedades como la hipertensión y la diabetes.
Tratamiento de la cuperosis
Además de evitar o atenuar la exposición a los factores desencadenantes, entre los cuidados cosméticos puedes adoptar algunas medidas. Esto es más importante si tu piel es sensible e hiperreactiva. Entre ellas está el uso de jabones suaves, una correcta limpieza e hidratación de la piel, el uso de lociones astringentes y el uso de un protector solar con el FPS adecuado.
Eliminación con láser
Las diversas tecnologías que se utilizan para tratar estas telangiectasias con láser tienen diferentes ventajas. La base para estos tratamientos es hacer incidir el láser en los glóbulos rojos. Así, la longitud de onda específica para la hemoglobina hace que la energía lumínica sea absorbida por esta sustancia y transformada en calor. La temperatura de la sangre se eleva y ello hace colapsar el vaso dilatado permanentemente.
Luz pulsada intensa
El IPL hace que la luz emitida por una lámpara de xenón sea ajustada gracias a cristales que permiten únicamente el paso de las ondas que van a usarse. De esta manera alcanza las profundidades de todos los tipos de piel. Es útil si quieres eliminar vasos de gran tamaño.
Láser Neodimio-YAG
Este láser es el que tiene el efecto más penetrante, por lo que está indicado para tratar lesiones profundas y vasos muy pronunciados. Es capaz de calentar la hemoglobina en su interior sin causar daño a los tejidos circundantes.
Láser V-Beam
Esta tecnología de láser de colorante pulsado permite eliminar telangiectasias y angiomas y es útil para vasos pequeños y medianos. Cuenta con un sistema de enfriamiento, por lo que causa pocas molestias.
Puedes prevenir la cuperosis con medidas preventivas y cuidados generales y cosméticos, pero el láser te ayudará a eliminarla si se presenta.
