La psoriasis es una enfermedad de la piel que puede ser de origen autoinmunitario. Causa enrojecimiento, picor, descamación e incluso inflamación. No es contagiosa, pero puede tener un carácter hereditario siendo mucho más propensos a padecerla los hombres.
Aunque podemos definir qué es la psoriasis se desconoce todavía la causa de su origen y todavía hay muchos aspectos de la enfermedad que se siguen estudiando, por ejemplo, por qué los brotes son mucho más fuertes en unas personas o la diferente forma en la que se manifiesta.
No obstante, se sabe que hay factores que desencadenan los brotes o que hacen a las personas más propensas a padecerlos. La obesidad, los nervios y el estrés, los cambios hormonales o el consumo excesivo de alcohol pueden causar su aparición.
Para el diagnóstico de la psoriasis el médico de cabecera deriva al paciente al dermatólogo, el cual realiza el diagnóstico mediante la observación de la piel. En casos en los que pueda haber dudas se puede realizar una biopsia que lo confirme.
No tiene cura, pero existe tratamientos para la psoriasis cuya misión es aliviar los síntomas y evitar la aparición de nuevos brotes. Estos tratamientos hacen más fácil la vida de las personas que sufren esta enfermedad, la cual supone no solo un problema de picores, también un problema estético.
Existen diferentes tipos de psoriasis siendo la más rara de todas la que afecta a las articulaciones y que se conoce con el nombre de artritis psoriática. En estos casos, el paciente necesita no solo del tratamiento de un dermatólogo, sino también de un reumatólogo.
En este caso es fundamental un diagnóstico temprano de la enfermedad, ya que si no se ataja a tiempo puede causar daños en las articulaciones bastante graves. Este problema suele aparecer en el diez por ciento de las personas que padecen la enfermedad.
Psoriasis y tratamientos
Veamos con detenimiento los tratamientos que existen para la psoriasis en la actualidad.
–Buenos hábitos de higiene: es el principal de los tratamientos para la psoriasis. El paciente debe de lavar la piel a diario con jabones adecuados e hidratarla. Para ello puede utilizar los productos recomendados por su dermatólogo.
–Sustancias de uso tópico: Son los tratamientos que normalmente ofrecen los dermatólogos para ayudar a sobrellevar los síntomas de la psoriasis. Lo habitual es comenzar con cremas en forma de loción y limpiadores específicos para este problema y, cuando la enfermedad empieza a tener manifestaciones más agresivas se pueden iniciar otros tratamientos como los esteroides y los retinoides.
–Medicación para casos más graves: Cuando la psoriasis avanza se hace necesario pasar a medicaciones más fuertes para controlar los brotes. El problema de estos medicamentos es que tienen efectos secundarios bastante molestos como ocurre con el Metotrexato. Por este motivo es imprescindible realizar estos tratamientos siempre bajo la supervisión de un dermatólogo que será el que se encargue de ir solucionando cualquier problema que pueda surgir.
–Medicación en clínicas dermatológicas: Se ha demostrado que el sol es muy bueno para la psoriasis y que todavía puede ser mejor si se combina con la aplicación de luz ultravioleta artificial. La fototerapia de mayor relevancia es el UVB de banda estrecha. También destaca el tratamiento que se conoce como PUVA y que consiste en la administración de una sustancia oral tópica seguida de la radiación UVA.
Estas técnicas, enmarcadas dentro de los tratamientos de fotoquimioterapia, han demostrado ser muy efectivos para la mayoría de los pacientes y siempre deben de ser administradas por un dermatólogo.
Entre los últimos tratamientos a destacar y que han supuesto un gran avance para las psoriasis generalizadas y resistentes, está la terapia biológica, la cual debe de ser prescrita a nivel hospitalario.
